El Valle de las Reinas, ubicado en un wadi o valle vecino a la necrópolis de los faraones, alberga las tumbas de las mujeres reales del Nuevo Reino del Antiguo Egipto. Las esposas de los faraones, las princesas e incluso un puñado de príncipes fueron enterradas aquí desde las dinastías XVIII hasta la XX.

Conocido como "Ta-Set-Neferu" - "el lugar de la belleza" - en la antigüedad, de las más de 75 tumbas que conocemos, solo cuatro están abiertas al público. Los visitantes pueden ingresar a los lugares de enterramiento de la reina Titi, los príncipes de Ramesside Khaemwaset y Amunherkhepshef, y la tumba considerada la más hermosa de Egipto: la de Nefertari.

Una de las reinas egipcias más conocidas, Nefertari Meritmut fue la primera de las esposas reales de Ramsés el Grande. Nombrada "Hermosa compañera, amada de Mut", tenía una buena educación y estaba involucrada en la política. Entre muchos otros apodos, Ramsés la llamó "aquella por la que brilla el sol", y su importancia se deja sentir de inmediato al entrar en su espectacular tumba. Escenas exquisitamente coloridas decoran las paredes de las tres cámaras y sus pasillos de conexión; mientras las estrellas doradas brillan desde los techos. El amor de Ramsés por su primera esposa también se demuestra en el enorme templo de roca dedicado a ella que se encuentra junto al suyo en Abu Simbel.

Si bien la tumba de Nefertari es sin duda la más grande y hermosa del valle, si la entrada es demasiado cara, la tumba de Amunherkhepshef también merece una visita por sus relieves bien conservados.